El presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, ofreció disculpas públicas este sábado tras la polémica generada por la declaración de la ley marcial a principios de semana, que fue levantada en la madrugada del miércoles.
EFE / Infobae
Yoon reconoció la angustia que su decisión causó entre la población y anunció que deja a su partido la responsabilidad de determinar el rumbo político, incluida la continuidad de su mandato.
“Me disculpo sinceramente ante los ciudadanos que se sintieron muy angustiados”, expresó Yoon en su primera comparecencia pública desde el fin de la medida excepcional.
“Dejaré a manos de mi partido estabilizar la situación política en el futuro, incluido mi mandato”, añadió, dejando entrever que su permanencia en el cargo podría depender de las decisiones internas de su formación política.
Yoon sorprendió a la nación y a la comunidad internacional el martes por la noche al imponer la ley marcial por primera vez desde 1980 y desplegar tropas y helicópteros en el Parlamento.
Pero los legisladores consiguieron rechazar el decreto, obligando a Yoon a revocar la orden en las primeras horas del miércoles, en una noche de extraordinario dramatismo en una nación que se suponía una democracia estable.
Desde entonces, Yoon permaneció oculto y este discurso dirigido a la nación es el primero que pronunció en público.
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